JOSÉ LUIS CUEVAS
José Luis Cuevas tuvo una personalidad rebelde y desarrolló una gran habilidad para trazar lo más tenebroso del sufrimiento humano, ambos aspectos lo convirtieron en uno de los más aclamados artistas mexicanos en las décadas de 1950 y 1960.
En oposición al cálido humanismo y las políticas izquierdistas de los muralistas, Cuevas ofrecía una visión existencialista de la condición humana, que daba por sentada la desesperanza. “Me aburre la alegría y odio la felicidad cuando alguna vez creo entreverla en la expresión humana”, le comentó a Newsweek en 1963.
El dibujo en tinta conforma la gran mayoría de su trabajo en el que buscó representar a los desdichados de la tierra: los débiles, deformes y locos, con un imperturbable estilo expresionista que reflejaba la influencia de artistas como Goya, Breughel y Grosz, además de las formas del arte precolombino. “Mi interés en los moribundos y en los locos representa mi visión de la vida moderna”, dijo a la revista Time en 1954, cuando se expuso por primera vez su obra en Estados Unidos, en el edificio de la Unión Panamericana en Washington.
Fuente: nytimes.com